“Debemos cuidar nuestros recursos naturales con uñas y dientes de la voracidad de los monopolios internacionales, que los buscan para alimentar un tipo absurdo de industrialización y desarrollo, en los centros de alta tecnología en donde rige la economía de mercado.”
Juan Domingo Perón. Madrid, 21 de febrero de 1972
Según datos obtenidos con los satélites Grace, que estudiaron la evolución de los glaciares a escala global desde 2003 hasta 2010, los glaciares y cubiertas heladas del planeta están perdiendo cada año unos 148.000 millones de toneladas de hielo y los hielos de la Antártida y de Groenlandia, pierden otras 80.000 millones de toneladas. En total, estas 228.000 millones de toneladas de hielo perdido, están provocando un aumento del nivel oceánico de 1,5 milímetros anuales.
John Wahr, uno de los autores del estudio, indica que “La Tierra está perdiendo una cantidad increíble de hielo cada año, que va a parar al mar y este nuevo estudio nos ayudará a responder a importantes interrogantes acerca de la subida del nivel y de cómo las regiones más frías del planeta están respondiendo al cambio climático global”. Existen en la Tierra unos 160.000 glaciares y cubiertas heladas y hasta ahora, se tiene datos directos de su balance de hielo, (la suma anual de fusión y formación), de menos de 120 y de solo 37 de ellos hay registros de más de 30 años.
Por su parte, Jonathan Bamber (de la Universidad de Bristol, Reino Unido), publicó en la revista Nature el nuevo estudio global de hielos, concluyendo que los glaciares son un icono, un símbolo del cambio climático y que se ha venido asumiendo su retroceso notable en el planeta en las últimas décadas. Las grandes cordilleras asiáticas (Himalaya, Pamir, Tibet), merecen especial atención porque la respuesta de los hielos de éstas al calentamiento global, es de máxima importancia a escala regional ya que, como recuerda Bamber, aproximadamente 1.400 millones de personas dependen de lo ríos que fluyen desde el Himalaya y el Tibet.
Los científicos todavía no pueden anticipar cuáles serán las tasas de pérdida de hielo de los glaciares en los años venideros, es decir cuán rápido se van a ir reduciendo, pero tienen la certeza de que seguirán achicándose.
Y nosotros, en Mendoza, en el lejano sur de América, seguimos haciendo como si el problema no nos afectara; como si nuestros glaciares no estuvieran también retrocediendo.
Estamos viviendo un abril inusualmente cálido; la menor cantidad de agua de los ríos mendocinos, que se debe al menor tamaño de los glaciares que los alimentan, ha obligado a no entregarles agua a los regantes del sur de la Provincia pero, desde los grandes medios de comunicación. Intentan que la sociedad mendocina no dramatice este gran problema y en forma habitual y con demasiada frecuencia, difunden artículos que apoyan a la gran minería, o sea a la Mega Minería, que para extraer el oro de nuestras montañas, utilizará y contaminará millones de litros diarios de ese escaso y preciado elemento que es el agua mendocina.
Recordemos que Veladero, en San Juan, según la misma página del Ministerio de Minería de esa provincia, está gastando más de 8 millones de litros de agua por día; San Jorge, en Uspallata, pensaba gastar un poco más de esa cifra y Sales de Potasio, en Malargue, gastará más de 80 millones de litros de agua diarios, o sea que, alegremente, como si viviéramos sobre un gran acuífero o en zona de grandes lluvias y no en un desierto, estos emprendimientos ocupan millones y millones de litros, de ese valioso e irremplazable elemento que es el agua purísima que baja de los glaciares y que cada vez es más escasa para nuestros regantes.
Nos preocupa esta situación, porque pensamos en el futuro de nuestra Provincia y porque está en juego el sistema de vida que supimos construir.
Pero, como siempre decimos, no confíen solo en nuestras palabras; entren a cualquier buscador como el Google y escriban: GLACIARES PROYECTO GRACE. Más de 170 mil artículos, para entender de qué estamos hablando.