Los organismos humanitarios de Mendoza en más de una oportunidad han exigido, en casos puntuales, la detención provisoria de imputados por crímenes de lesa humanidad, como lo es el de Calos Rico, que fue funcionario del gobierno de Jaque, incluso del también peronista Lafalla.
Rico está acusado de haber sido partícipe del plan del terrorismo de Estado. Es comisario retirado y en el 78, cuando el Mundial de Fútbol fue, según él mismo lo ha afirmado, responsable de un órgano, en el marco del D2, para enfrentar "a los delincuentes subversivos", negando tener vinculación con el D2.
Sin embargo, testimonios concretos lo incriminan por haber tenido participación activa en la represión mediante la tortura, la desaparición de personas y la ejecución de militantes políticos. Es por ello que, como lo expresó el ministro de seguridad Carlos Aranda, Rico está, desde el miércoles 21, con pedido de captura en la orden del día, a consecuencia de una resolución de la Cámara Federal de Apelaciones, que hizo lugar a un amparo presentado por la fiscalía y la Secretaría de DDHH de la Nación.
Ordenan la "inmediata imputación y citación a indagatoria a Rico por privación ilegítima de la libertad, tormentos y tormentos seguidos de muerte". Por orden del juez Walter Bento, en septiembre del año pasado, Rico tenía prohibido salir del país. A consecuencia del pedido de captura, se lo fue a buscar a su domicilio y no se lo ha encontrado, ni se tienen señales de dónde podría ubicárselo.
Y si bien se lo acusa de asociación ilícita, Rico enfrenta ahora cargos más graves, puesto que la Cámara de Apelaciones, cuyo titular es el fiscal Omar Palermo, ordena imputarlo por crímenes de lesa humanidad. Al igual que Romano, la huída en la que han incurrido es una señal de admisión de las culpas que se les imputan.
PROSIGUEN ATENTADOS CONTRA DDHH
Difícilmente se trate de reacciones espontáneas, personales o de pequeños grupos que odian a los organismos de DDHH y a sus abogados, atacándolos y endilgándoles que "defienden a los delincuentes".
Desde hace 15 a 20 días que se vienen repitiendo los atentados a recordatorios de las víctimas de la dictadura, como el que se levanta frente a los juzgados federales, en España y Pedro Molina; las pintadas insultantes y las calumnias a los abogados, como asimismo amenazas a jueces y fiscales, y esta última semana a un recordatorio a Madres en la Plaza San Martín, con leyendas insultantes, que se reiteran en las páginas digitales.
En San Rafael, son constantes los atentados a obras similares que se levantan en el llamado Parque de la Memoria, como lo denuncian los Organismos de allí.
Todo expresa ya, por una serie de elementos, que este obrar cuasi mafioso, proviene de una estructura catapultada por elementos que transpiran odio y venganza ante la profundización de las acciones legales contra los genocidas, ya con más de 200 de ellos condenados y en prisión.
Por Facebook se da a conocer con las diatribas tradicionales, una organización que se denomina Frente Nacional Argentino. Incluso ya tienen presencia en Mendoza elementos orgánicos que responden a las políticas desestabilizadoras de las usinas del poder globalizado del imperialismo.
Esa expresión es aquí, con nombre y apellido, una llamada Fundación Alberdi, aparato que se instala en gran parte del país con denominaciones afines al lugar.
Se trata, por el momento, de envenenar el humor colectivo que posibilite, llegado el momento, desarrollar acciones más contundentes hasta conseguir los objetivos de acceder al poder político.
(Fuente: LA QUINTA PATA)
