Sin mencionar detalles de su vida, José Larralde es un cantor del pueblo paisano trabajador. Encarna las aspiraciones, las más de las veces imcumplidas, de la gente que ofrece la vida a la patria desde el trabajo silencioso, mal remunerado y tan poco considerado por los patrones en general.
Almbrador de oficio, del pago de Huanguelén, Pcia. de Buenos Aires, fue descubierto en su calidad de artista por Jorge Cafrune en una de sus giras puebleras.
José Larralde tiene la poesía del filósofo, aprendida en el dolor y el sufrimiento, y mantiene viva la esperanza del peón que, aunque relegado, siempre aspira a una vida más justa. De lenguaje duro, conforma al que vive su condición y perturba y molesta al que es causante directa o indirectamente de la misma.
Rechaza al dios proclamado por las iglesias pero afirma su fe en un Dios que algún día será testigo del triunfo del hombre sobre la desigualdad y la injusticia.
Su género propio es la milonga pampeana.
Alcánzame la copa de tu pena,
que yo quiero mirar su fondo oscuro.
No la bebas de golpe, te lo pido,
saboréala despacio, y sin apuro.
Si te embriagas de rabia o de amargura,
y te pesan los párpados de dudas,
allí mismo, en el fondo de tu pena
hallarás mi comprensión desnuda,
y en la mano caliente que te brindo
no estará la recíproca esperando,
pero sí mi corazón abierto,
junto al tuyo con ansias palpitando.
No desmayes, y alcánzame tu copa,
a esa pena le faltan muchas cosas:
la madura respuesta que da el tiempo
y la fuerza de lucha bondadosa.
Con un poco de amor serás muy fuerte,
y si ese amor suplanta lo imposible
vencerás con el tiempo toda suerte
y serás en la lucha lo invencible.
No mendigues jamás calor y abrigo,
que la lástima no llegue hasta tu puerta,
el afecto prestado es el castigo
que la vida por fácil siempre oferta.
Así ha de ser desde que el mundo es mundo,
desde que Dios te regaló existencia,
no la aproveches para ahogarte en ella
ni de la derroches buscando experiencia.
Y recuerda que con un poco de amor serás muy fuerte,
y si ese amor suplanta lo imposible,
vencerás con el tiempo toda suerte
y serás en la lucha... lo invencible.