A pesar de la iniciativa legislativa que, frente a la envergadura de la catástrofe social, adoptara el gobierno del PP en mayo de 2013, el número de desahucios en España sigue incrementándose. Según datos del Banco de España, en 2013 hubo un 11% más en relación al año anterior. El informe indica que, durante 2013, 50 mil viviendas pasaron a manos de los bancos bajo la forma de ejecuciones hipotecarias. De ese total casi 39 mil corresponden al ítem primera vivienda lo que deja en la calle a las familias y, peor aún, endeudadas de por vida. Es que la legislación vigente en España, más allá de la flamante enmienda que impide el desalojo a los sectores más vulnerables (con menores a tres años e ingresos inferiores a 1600 euros mensuales), y a diferencia de lo que ocurre por ejemplo en la Argentina, mantiene las garantías en favor de los bancos en la medida en que la ejecución hipotecaria no cancela la totalidad de la deuda del hipotecado sino apenas el equivalente a su valor de mercado en el momento de la ejecución que, en general, y luego de la explosión de la burbuja inmobiliaria, oscila en alrededor del 50% del crédito original. La norma vigente, entonces, garantiza que, frente a la pinchadura de la burbuja especulativa generada por el propio sistema financiero sea precisamente este quien se beneficie con un reaseguro y que sean las familias las que, una vez ejecutado el desahucio y perdida su vivienda todavía le deban al sistema financiero la mitad del valor original de su ex hogar. Esa situación dramática ha llevado a que se produjeran, según estimaciones no oficiales de la entidad Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH), más de 120 suicidios desde 2010 a la fecha. Esa misma organización consiguió reunir un millón y medio de firmas para el tratamiento de Iniciativa Legislativa Popular (ILP) que fue ignorado por la mayoría del PP en el parlamento y remplazada por esa enmienda que, a la luz de los resultados de 2013, parece haber fracasado. Según relató a este diario Ernesto Marco, vocero de la PAH en Barcelona, "el requisito para el tratamiento de una ley es el de reunir medio millón de firmas, nosotros juntamos el triple y a pesar de eso el Partido Popular hizo uso de su mayoría absoluta para bloquear su ingreso al parlamento". Además, "el propio Tribunal Superior de justicia de la Unión Europea dictó una sentencia que incumplía directivas de la UE en relación a los derechos de los consumidores. Por eso aplicaron unas reformas que son cosméticas," se lamentó.
La iniciativa del PAH, según explicó el mismo dirigente a Tiempo Argentino se resume en básicamente tres puntos "en primer lugar que se regularice la dación en pago retroactiva, es decir en caso de que se trate de deudores de buena fe puedan entregar la vivienda y saldar el total de la deuda y que sea retroactivo para aquellas personas que ya fueron desahuciadas en los últimos años y siguen endeudadas. En segundo lugar proponemos reconvertir el stock de viviendas vacías en vivienda pública de alquiler (España es el país que tiene menor oferta de vivienda social y es el que mayor número de viviendas vacías tiene). Y en último lugar la paralización de todos los desahucios cuando se trata de deudores de buena fe. Es una medida de emergencia". explicó el vocero de la organización que fue inaugurada hace cinco años en Barcelona y ya tiene plataformas en 208 ciudades y localidades de todo el país que asesoran legalmente y dan respuestas concretas a las familias desahuciadas. Desde 2007 en adelante la oferta de créditos se ha paralizado, "la gente opta más por el alquiler y, además, los bancos ya no dan créditos por los altos niveles de morosidad".
LA ARGENTINA. Si bien no existe disponible un informe del BCRA o algún organismo que indique la cantidad de desahucios o ejecuciones hipotecarias que se hayan registrado en nuestro país en 2013 fuentes del banco Hipotecario y del Credicoop coinciden en que las ejecuciones hipotecarias "son marginales, se cuentan con los dedos de la mano" al igual que la morosidad en los créditos.
Más allá de la inestabilidad económica y social que sufre la ciudadanía en España a diferencia de lo que ocurre en la Argentina, también es cierto que la oferta de créditos hipotecarios de la banca privada local es marginal en comparción con el déficit de viviendas y con relación también al monto total de créditos del sistema financiero que se orienta principalmente al crédito al consumo. Según datos del informe mensual de préstamos al sector privado no financiero elaborado en abril por el CEFID-AR, el monto del stock de préstamos en pesos destinados a la vivienda familiar es de apenas un 5% del total.
Para Alfredo García, Economista Jefe del Banco Credicoop, "la mora bancaria está en los niveles históricos más bajos y en especial la de créditos hipotecarios por eso casi no hay ejecuciones. Hay un escaso nivel de crédito hipotecario en la Argentina y de los préstamos en general. El del sector privado roza el 13% del PBI cuando en otros países como Chile llega al 73% del PBI, en Brasil 68% y en Paraguay el 41 por ciento. Por los altos niveles de inflación en pesos es díficil lograr que los bancos generen instrumentos crediticios a largo plazo como lo son los préstamos para la vivienda. Se requiere la creación de instrumentos financieros de ahorro a largo plazo o tiene que aparecer el gobierno con planes como el Pro.cre.ar que también tiene muy bajos índices de morosidad. Los créditos en dólares para la vivienda no son recomendables porque no se pueden vincular ingresos familiares en pesos con deudas en moneda extranjera, ya lo vivimos."
Fuentes del Banco Hipotecario confirmaron que "incluso en el Pro.cre.ar los índices de mora son muy bajos y tiene que ver con una estabilidad social y laboral pero también cultural." Las mismas fuentes recordaron que, durante 2012, el impulso del Estado al mercado de crédito hipotecario a través del Pro.cre.ar ha sido descollante llegando a multiplicar por diez la cantidad de préstamos otorgados por el sistema privado.
En 2013, si bien todavía no concluyeron el estudio, los números arrojarán proporciones similares. La banca privada tiene una cuenta pendiente con la vivienda de los argentinos.
La cifra
11%
Es lo que se incrementaron entre 2012 y 2013 los desahucios en España, luego de aprobada la ley del PP.
(Diario Tiempo Argentino, domingo 25 de mayo de 2014)