El Premio Nobel de Literatura aprovecha los homenajes que le rinden en España para disparar sus dardos sobre la Argentina, la presidenta, el peronismo y la renacionalización de YPF.
En un encuentro con los medios de comunicación en la ciudad española de Las Palmas, donde recibe una serie de homenajes, el premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa culpó ayer al peronismo de la “autodestrucción” que, a su juicio, está llevado a la Argentina al subdesarrollo, el empobrecimiento y el populismo. Llegó incluso a comparar al movimiento justicialista y su trayectoria, con la que llevó al poder en Alemania a Adolf Hitler durante la primera mitad del siglo XX. Sin embargo defendió que América Latina vive uno de los mejores momentos de su historia en términos de democracia, libertades y prosperidad. Haciendo una expresa salvedad: precisó que lo que hay son “excepciones”, como la Argentina, Bolivia o Venezuela.
Vargas Llosa se centró en particular en la situación de la Argentina, que según dijo, era un país “del primer mundo” cuando “tres cuartas parte de Europa estaban en el subdesarrollo”, que fue la primera nación que acabó con el analfabetismo y que, hasta mediados del siglo XX, disfrutó de una prosperidad “envidiable”. El peruano sostiene que esa dinámica se quebró de una manera “trágica” para la Argentina “sin que haya habido ningún factor externo que conspire contra su desarrollo”, sino por la irrupción del peronismo, cuyas políticas están teniendo como consecuencia el “empobrecimiento” y la “barbarización” del país. Precisó que el peronismo “es un flagelo que se imponen los propios argentinos. Y no es el único caso en la Historia: los alemanes con Hitler hicieron una cosa parecida y, por lo menos han salido de eso”. Y agregó que “la tragedia de Argentina es que nunca ha salido”.
El ganador del premio Nobel de Literatura, quien hace apenas unos días consideró peligroso para la democracia la existencia de movimientos que reclamen por sus derechos, como Los Indignados españoles, describió a la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, como “un ejemplo flagrante” de la “vocación autodestructiva” en la que está atrapada la Argentina desde hace años. Y opinó que la tensión que ahora se está viviendo entre España y la Argentina tras la nacionalización de YPF no es un hecho aislado, “sino una episodio dentro de muchísimos otros, de políticas puramente demagógicas y presentistas”.
Para finalizar, dijo que “ese es un problema que no sólo tienen los españoles con la Argentina, lo tienen sobre todos los argentinos con la Argentina, por la insensatez de las políticas de la señora Kirchner. Esta señora practica una política populista, absolutamente demagógicas e insensata que a quienes van a perjudicar, sobre todo, es a los argentinos”, sentenció. Su crítica a las políticas de preservación de sus propios recursos por parte de la Argentina, llega dos días después de su abierta defensa al salvataje de Europa y a las severas políticas de ajuste implementadas por la Comunidad para conseguirlo.
(Diario Tiempo Argentino, sábado 19 de mayo de 2012)