Se hace política como instrumento de cambio, cuando se defiende el interés del conjunto. No puede haber un pueblo grande si no hay una Nación grande y una región latinoamericana integrada.
Agradezco a todas las organizaciones sociales, políticas, legisladores provinciales y nacionales, intendentes de todo el país, gobernadores, decanos de universidades, investigadores, militantes, artistas, gremios, medios de comunicación, los que participaron y acompañaron el lanzamiento del Plenario Nacional de La Corriente de Liberación Nacional del Frente para la Victoria.
Estoy convencida que desde el Proyecto Nacional y Popular hay que profundizar los mecanismos de organización en esta nueva Argentina pues desde nuestra verdad relativa vamos a encontrar siempre una verdad superadora que nos permita colocar a la Argentina en el lugar que se merece.
Néstor Kirchner representó el resurgir argentino. Él ha resignificado la política y ha puesto en el valor militante el trabajo comprometido y la defensa de las convicciones.
La organización popular es el camino, ese es nuestro lugar más allá de los cargos que algunos compañeros tenemos en este gobierno. El ser nacional nos une. Hicimos muchos cambios pero son muchos más los que aún faltan. En muchas áreas todavía tenemos la infraestructura devastada por más de tres décadas neoliberales. Unir a la Argentina con caminos viales, con redes ferroviarias, con el desarrollo industrial, con más escuelas, con una salud pública más integradora, con nuevos avances en tecnología, con más identidad nacional, con menos especulación, es avanzar.
Los que siempre ponen palos en la rueda en el camino, dicen que abrimos varios frentes. José Ingenieros diría que los ponen porque son incapaces de recorrer esos caminos.
La política nos hace artesanos en la construcción de las transformaciones. Porque las realidades en cada región son diferentes. Queremos un país competitivo, es decir, con la mayor competencia para la construcción colectiva. Queremos aportar a la inclusión social, con producción, tecnología, avances científicos, trabajo, crecimiento económico y justicia social.
Tenemos una patria con memoria, con verdad y con justicia. Sabemos que ningún proyecto político tiene sentido si no sirve para mejorar las condiciones de vida. Los argentinos tenemos que entender que la política debe ser la herramienta para mejorar la vida del pueblo y no puede ser la pelea permanente de intereses para mejorar con difamaciones sus ambiciones en la carrera política o lo que es peor llenar sus bolsillos.
Se hace política como instrumento de cambio, cuando se defiende el interés del conjunto. No puede haber un pueblo grande si no hay una Nación grande y una región latinoamericana integrada. Quienes trabajamos desde un proyecto político debemos ejercer la representatividad y liderazgos de cara al y con el pueblo. Lo más importante que tenemos es la fuerza del pueblo argentino.
(Diario Tiempo Argentino, 1 de abril de 2012)