“Los argentinos son propietarios de este museo que posee la colección de arte más importante de toda Latinoamérica”, afirmó ayer la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, al inaugurar las obras de remodelación de 18 salas del Museo Nacional de Bellas Artes. La ceremonia se hizo en la sala dedicada al pintor Antonio Berni, en la sede del museo, en Avenida del Libertador 1473, del barrio de Recoleta; el acto se hizo al pie de la obra de Berni titulada La pesadilla de los injustos. La remodelación inaugurada comprende un conjunto de 16 salas del primer piso y otras dos del segundo, sobre una superficie total de 3200 metros cuadrados. La Presidenta restituyó también más de 4000 piezas arqueológicas originarias de Ecuador y Perú, con la presencia de los embajadores de esos dos países.
Argentina se convierte en el primer país de Sudamérica en restituir patrimonios a otros Estados hermanos, en cumplimiento de la Ley 25.743 de Protección del Patrimonio Arqueológico y Paleontológico, promulgada en 2003. “Es un honor y un placer estar restituyendo su patrimonio cultural a países como Ecuador y Perú, en un mundo que se ha caracterizado en arrebatar el patrimonio cultural a esos pueblos”, dijo la jefa de Estado.
Agregó que “sería importante que se pueda cobrar una patente cultural cuando no nos devuelven los tesoros culturales” porque “de esa manera viviríamos en un mundo mejor y más justo”. Cristina expresó su satisfacción por “haber contribuido en estos 12 años a engrandecer la infraestructura de la cultura argentina”.
Cristina Kirchner recordó que las obras reintegradas a Ecuador y Perú “habían sido sustraídas y fueron recuperadas”. Explicó que la devolución fue posible gracias al trabajo realizado por una división especial de la Policía Federal Argentina. Insistió en que “vivimos en un mundo que se ha caracterizado, por parte de las grandes potencias, en arrebatar el patrimonio cultural de los pueblos. Uno puede ver en los museos más importantes del mundo pedazos de Grecia, de Siria, de Egipto, del Asia e inclusive de nuestra América latina y que no son restituidos”.
Sostuvo que “así como se cobran las patentes de los inventos medicinales, los países que siguen sin devolver los tesoros culturales deberían por lo menos pagarles a los países a los que pertenecen una suerte de royalty porque han sido elaborados por culturas que no son las de ellos”. La restitución se divide en 4000 piezas arqueológicas a Perú y otras 500 a Ecuador que se hallaban en casas particulares, locales y ferias de la ciudad de Buenos Aires.
En otro momento de su discurso, la mandataria destacó que “es muy importante que un pintor tenga invención y nos deje obras como las de Antonio Berni y tantísimos otros, que fotógrafos tomen fotografías que nos reflejen como sociedad y como cultura, pero el Estado debe darles el lugar para que éstas puedan ser exhibidas y conocidas”. Resaltó que las obras que se inauguraron se suman “al Museo del Bicentenario, al Centro Cultural Néstor Kirchner, a las 99 casas del Bicentenario, al Museo del Bicentenario de Santiago del Estero, al del Chaco, a la Casa del Bicentenario de Capital, al Museo de la Lengua y la Palabra”.
Cristina Kirchner remarcó que el objetivo del gobierno nacional es que “el pueblo argentino pueda acceder al arte” porque “el pueblo puede interpretarlo, verse reflejado y conmovido”. De la ceremonia participaron el gobernador bonaerense Daniel Scioli; el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández; el secretario general de la Presidencia, Eduardo de Pedro; la ministra de Cultura, Teresa Parodi; el canciller Héctor Timerman; y los ministros de Economía, Axel Kicillof, de Educación, Alberto Sileoni, y de Salud, Daniel Gollan.
También estuvieron presentes el titular de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde; el diputado nacional Andrés Larroque; el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro; el presidente del Instituto de Cultura bonaerense, Jorge Telerman; y la directora ejecutiva del museo, Marcela Cardillo. además de numerosos artistas como Daniel Santoro, Marta Minujin, Sara Facio, Adriana Lestido y Rep. Las obras de restauración y remodelación realizadas en el museo demandaron una inversión total de 41.109.201 pesos aportados por el Ministerio de Cultura de la Nación. En los trabajos sobre una superficie total de 13.112 metros cuadrados, participaron 168 obreros y 32 técnicos especializados.
El gobernador bonaerense y candidato a presidente por el FpV, Daniel Scioli ponderó la remodelación del museo porque contribuye a posibilitar el “acceso a la cultura de todos los sectores”. Para Scioli, “éstas son inversiones que hacen a la identidad de los argentinos y a la igualación de oportunidades de acceso a la cultura”.
Scioli sostuvo que “en estos años no sólo se ha potenciado este museo, desde el Estado se han construido cientos de espacios que apuestan a la cultura, como el museo (de Arte Moderno) que inauguramos en Mar del Plata”. Por su parte, el titular de la cartera de Economía señaló que “muchos que no cuestionan cuando el Estado invierte en un parque industrial, tienen muchos prejuicios ante las inversiones culturales, pero este proyecto ha demostrado que ambas son necesarias y deben hacerse”.
En ese sentido, el ministro recordó que “este proyecto no sólo invirtió en la reconstrucción de la matriz productiva, sino que también lo hizo en importantes políticas culturales como las Casas del Bicentenario o el Centro Cultural Néstor Kirchner”. A su vez, Teresa Parodi explicó que “esta ampliación es fundamental para poder exhibir de manera correcta una parte importante de la colección de este museo, que forma parte del patrimonio cultural de todos los argentinos”.
Parodi consideró que “esta es una inversión imprescindible e histórica que estaba siendo esperada desde hace mucho, y para el Estado estas inversiones culturales son tan vitales como las que se hacen en materia educativa”. Por otra parte, el titular de Educación destacó que “esta ampliación no es sólo de un edificio, es también la ampliación del acceso de todos a esta parte de la cultura”. Sileoni aseguró que “si el Estado no toma el rol protagónico que asumió en estos años en el desarrollo y construcción de cientos de propuestas y espacios culturales, lugares como éste terminan siendo privilegio de unos pocos”.
La presidenta de la Nación hizo una larga y detallada recorrida por los espacios remodelados del Museo Nacional de Bellas Artes, antes y después del acto. Cristina visitó las diferentes salas y observó las obras, a la vez que aprovechó la ocasión para tomarse selfies con trabajadores del museo y con algunos artistas, con los que se detuvo a conversar. Uno de ellos fue el artista plástico Gyula Kosice, con quien dialogó.
El escultor, de 91 años, uno de los precursores mundiales del arte cinético y lumínico, le dijo a la agencia Télam que “la Presidenta tiene una memoria extraordinaria”. Comentó que lo había identificado de inmediato, aunque se habían visto “hace tiempo”. También le contó que había encontrado una obra suya “en un sótano”. Agregó que ella “la sacó de ahí y la hizo colocar en la sala de audiencias de la Casa Rosada, y eso para mí es un gran orgullo”, concluyó Kosice.
Marta Minujin valoró la remodelación porque “estas inversiones son las obras que hay que hacer, son las obras que quedan, porque los gobiernos pueden pasar, pero el arte va a quedar siempre”. Agregó que ella prácticamente nació “dentro de este museo” porque “desde muy chica visitaba sus salas y cuando volvía a casa dibujaba estas obras”.
(Página 12, domingo 23 de agosto de 2015)