El agua es una molécula formada por dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno y es esencial para la supervivencia de todas las formas conocidas de vida, incluida la humana. Sus propiedades la convierten en un agente esencial en muchos de los procesos metabólicos de los seres vivos, como la fotosíntesis y la respiración. El agua cubre el 71 % de la superficie de la corteza terrestre, principalmente en los océanos donde se concentra el 96,5 % del agua total. Los casquetes polares poseen el 1,74 %; los depósitos subterráneos el permafrost y los glaciares continentales suponen el 1,72 % y el restante 0,04 %, es decir, menos de la mitad de la centésima parte del agua total, se encuentra en lagos, atmósfera, embalses y ríos.
La historia muestra que las civilizaciones primitivas florecieron en las cuencas de los ríos, como la Mesopotamia, cuna de la civilización humana, surgida en el fértil valle del Éufrates y el Tigris; y también Egipto, una espléndida civilización que dependía por completo del Nilo y sus periódicas crecidas.
Del mismo modo, áreas en las que el agua es ausente o muy escasa, como el norte de África , han tenido históricamente dificultades de desarrollo.
La población mundial ha pasado de 2630 millones en 1950 a 6800 millones en 2010 y en este periodo de 1950 a 2010, la población urbana ha pasado de 733 millones a 3505 millones y es allí donde la disponibilidad del agua resulta problemática y se ha convertido en una de las principales preocupaciones de los gobiernos en todo el mundo. Por eso la Asamblea General de Naciones Unidas, aprobó el 28 de julio de 2010 una resolución que reconoce al agua potable como derecho humano esencial.
El agua no alcanza para una población creciente y, por culpa del cambio climático, cada vez tendremos menos agua disponible en todos los rincones del planeta, no importa su nivel económico, como la sequía récord que sufren en el estado de California, en Estados Unidos, donde la ciudad de Mountain View –sede del gigante Google– declaró la emergencia por falta de agua ya que las autoridades creen que el 2014 podría ser el sexto año más seco desde que se tienen registros.
En California se produce más del 15% de la producción agrícola de Estados Unidos y están empezando a tener problemas para mantener sus plantaciones, porque la nieve acumulada en las montañas sigue disminuyendo y su multimillonaria industria vitivinícola entrará en crisis debido a la sequía.
Lo mismo sufren los habitantes de Carrizal, en Ugarteche, que al secarse los pozos de la zona, se han visto obligados a tener que pagar, para poder acceder a un poco de agua potable.
Y con esta realidad golpeando a las puertas de nuestra Mendoza, nos asombra que algunos funcionarios, ya casi con las maletas listas para irse, le hayan puesto todo su empeño y sus horas de labor, a proyectos mineros que, como mínimo, implican comprometer parte de la poca agua que tenemos.
Teniendo problemas que exigirían la mayor cantidad de neuronas de nuestros Gobernantes para encontrarle soluciones, como la falta de energía; el consumo creciente de drogas; la violencia en aumento; el mayor consumo de alcohol en los jóvenes y muchos otros temas que afectan en serio la vida de todos los mendocinos, algunos funcionarios, quien sabe motivados porque razones, se dedican solamente a tratar de convencer a los mendocinos que extraer el Cobre y el Molibdeno del yacimiento Cerro Amarillo y llevárselo en bruto a las casas matrices de las grandes empresas mineras, es una oportunidad que no podemos perder!!
O tratan de avanzar sobre Hierro Indio, en las nacientes del Río Atuel, mientras todo el pueblo de General Alvear está languideciendo por falta de agua.