Con la mirada puesta en 2015 y un discurso atado a la coyuntura, el diputado Sergio Massa presentó ayer el armado nacional del Frente Renovador en un almuerzo que tuvo varias caras conocidas. La foto del encuentro echó definitivamente por tierra los pronósticos de un masivo trasvasamiento de dirigentes oficialistas al massismo tras las elecciones de octubre, tal como anunciaban/anhelaban dirigentes de ese espacio: junto al ex intendente de Tigre sólo aparecieron varios ex gobernadores del peronismo disidente, antiguos funcionarios del kirchnerismo desencantados y las figuras que lo acompañaron desde un primer momento. En su discurso, se diferenció tanto del PJ como del macrismo, pidió que “los funcionarios dejen de esconderse y dar excusas y empiecen a dar soluciones” respecto de la cuestión energética, y planteó una agenda de diez puntos centrada en lo que llamó “los problemas de la gente”.
Si bien el mensaje giró en torno de “la pluralidad” y “dejar de lado las banderías políticas”, el flamante armado nacional que presentó ayer el Frente Renovador se parece bastante al viejo justicialismo disidente: los ex caciques provinciales Carlos Reutemann, Mario Das Neves (candidato a vicepresidente de Eduardo Duhalde en 2011), Juan Carlos Romero (compañero de fórmula de Carlos Menem en 2003), Carlos Verna y Jorge Busti; el ex ministro de Economía, Roberto Lavagna; el ex jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y el ex titular del Banco Central, Martín Redrado, fueron las figuras principales que logró juntar Massa para proyectar su espacio más allá de la provincia de Buenos Aires.
Con este encuentro, el flamante diputado comenzó a probarse el traje de candidato a presidente mientras criticaba a quienes hacen lo propio: “Nosotros armamos lo que llamamos un encuentro para la agenda de 2014, porque mientras gran parte de la dirigencia política se preocupa por la discusión de 2015, lo vimos ayer incluso en la discusión de autoridades en el Partido Justicialista, nosotros creemos que hay una agenda de 2014 que no puede esperar a 2015”, dijo ayer. El PJ del que proviene no fue el único espacio político al que le dedicó críticas: también se diferenció de su socio en los comicios de este año, Mauricio Macri. “El PRO es una fuerza localizada en la Capital y que expresa más bien lo que es la derecha argentina, y esto es una fuerza de centro”, manifestó.
Respecto de las propuestas para solucionar “los problemas de la gente”, el Frente Renovador planteó ayer una agenda que consta de diez puntos: “La construcción de un mensaje de respeto a la pluralidad y unidad de los argentinos”; “la defensa de salarios y jubilados contra la inflación”; “la inversión como motor de la solución a esta inflación”; “la consolidación de una matriz y política energética de largo plazo”; “la independencia del poder Judicial mediante el fortalecimiento de las instituciones”; “la educación”; “la necesidad de policías municipales, de trabajar sobre el Código Penal y de la profesionalización de las fuerzas”; “propuestas de lucha contra el narcotráfico”; “fomentar el diálogo a partir del Consejo Económico Social”; y “el desarrollo de un programa de disminución de presión impositiva con énfasis en economías regionales”.
Del encuentro también formó también parte el núcleo duro del Frente Renovador bonaerense: los diputados Darío Giustozzi, Felipe Solá, Héctor Daer, Adrián Pérez y Graciela Camaño; los intendentes José Eseverri (Olavarría), Joaquín de la Torre (San Miguel), Jesús Cariglino (Malvinas Argentinas), Sandro Guzmán (Escobar), Gabriel Katopodis (San Martín), Gustavo Posse (San Isidro), Carlos Selva (Mercedes) y Mario Meoni (Junín). Además, fueron de la partida los economistas Miguel Peirano y Ricardo Delgado, el empresario José Ignacio de Mendiguren, y dirigentes bonaerenses como Juan José Alvarez y Baldomero “Cacho” Alvarez.
(Diario Página 12, domingo 29 de diciembre de 2013)