Cristina Kirchner señaló que el repudio al golpe de Estado no es de ningún partido político, porque se trató de “un atentado a la democracia, que es la forma de vida en que queremos seguir viviendo”. Informó que se recuperaron legajos originales de la Conadep.
“Esta recordación no es patrimonio de ningún sector político de la Argentina, porque cuando se atenta contra la democracia, cuando se expulsa de la Casa de Gobierno a un gobierno votado por el pueblo, aun cuando no se pueda estar de acuerdo con las políticas de ese gobierno, cuando se cierra un Parlamento donde están representados las provincias y los pueblos del país, no se atenta contra un partido o contra un sector político, sino que se atenta contra la democracia, que es la forma de vida en que queremos seguir viviendo.”
Dos días antes de un nuevo aniversario del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner volvió a poner la agenda de derechos humanos como una política de Estado independiente del gobierno de turno. Al acto, donde quedó inaugurado el Centro de Investigación e Interpretación para la Historia Reciente, emplazado en donde funcionó el centro clandestino de detención Mansión Seré, en el partido bonaerense de Morón, asistieron representantes de todas las bancadas opositoras en el Congreso y miembros de la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas que confeccionaron, desde 1983, el informe Nunca Más, cuyo legajo original fue restituido ayer al Estado argentino.
“Este lugar no quiere ser un lugar de recuerdo de la muerte, acá queremos conmemorar la vida, y porque queremos conmemorar la vida hay un espacio de la memoria, pero la mayor parte del predio está ocupada en actividades vitales”, celebró la mandataria la inauguración del espacio de estudios que fue resultado de la recuperación arqueológica del lugar donde funcionaba el centro clandestino durante la última dictadura. CFK señaló que quiere “conmemorar la memoria a partir del conocimiento, de la ciencia y la tecnología” más que desde la nostalgia. “Por eso, es casi una obsesión que tengo lograr que vuelvan aquellos cerebros que se fugaron del país”, dijo.
En tono conciliador, Fernández de Kirchner rindió homenaje a la labor que realizó la Conadep “creada durante la gestión del presidente (Raúl) Alfonsín” y que fue de capital importancia para poder llevar a cabo el Juicio a las Juntas. En el comienzo de su discurso, mencionó uno por uno a los miembros de la comisión, muchos de los cuales estaban presentes en el acto por invitación del Poder Ejecutivo. Entre ellos destacó a dos por su ausencia: la periodista Magdalena Ruiz Guiñazú y la ex funcionaria de la Alianza Graciela Fernández Meijide, ambas ausentes por no encontrarse en la ciudad al momento del acto (ver aparte).
Por otra parte, la Presidenta destacó la restitución de los documentos originales del informe de la Conadep que luego fuera publicado como el Nunca más, que se encontraba extraviado desde ese entonces. “Estos son los legajos originales que no estaban en poder del Estado porque Pablo Ferreira, agente de la Secretaría General de la Presidencia en aquel momento, los rescató, temeroso de que pudieran desaparecer”, relató. Según pudo averiguar Página/12, el documento será exhibido en el Museo del Bicentenario ubicado tras la Casa Rosada en la vieja Aduana Taylor.
Además de los miembros de la comisión y los representantes de los partidos opositores, entre el público del acto estaba Carlos García, uno de los cuatro participantes de la fuga de Mansión Seré que se llevó a cabo el 24 de marzo de 1978, Madres y Abuelas de Plaza de Mayo y los legisladores kirchneristas Juan Cabandié (CABA) y Eduardo De Pedro (diputado nacional), ambos hijos de desaparecidos. En el escenario se encontraban el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina; el secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli; el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, y el titular de la cartera de Justicia, Julio Alak; además del secretario de Derechos Humanos, Martín Fresneda; el intendente de Morón, Lucas Ghi, y su antecesor en ese cargo y actual titular de la Afsca, Martín Sabbatella.
A continuación, la mandataria recordó a los 30 mil desaparecidos: “Algunos eran militantes políticos que luchaban por ideas; había otros que ni siquiera eso, que a lo mejor figuraban en una agenda o eran parientes o se equivocaban”, indicó, antes de recordar que se ha cumplido con la medida anunciada el año pasado de corregir los legajos de aquellos trabajadores del Estado desaparecidos. “Figuraban como cesantes o como que habían abandonado su trabajo” antes de que se llevaran a cabo el relevamiento y la corrección, señaló CFK.
“Quiero decirles a los 40 millones de argentinos que la patria es de todos y que necesitamos que todos puedan tener los mismos derechos”: la Presidenta volvió a evocar la unidad en el tramo final de su discurso. “Necesitamos esta maravillosa libertad que hemos conseguido, donde cada uno puede decir lo que quiere y lo que piensa. Pero al lado de esa libertad vamos a luchar por más igualdad, por los que menos tienen, por los más pobres, para estar siempre junto a ellos. Ese es el mandato de los 30.000 desaparecidos, éste es el mandato de los que ya no están, de los que sufrieron estar junto a los que más necesitan, a los vulnerables, a los más pobres, a los que no pueden defenderse con sus propias manos –concluyó Fernández de Kirchner–. En nombre de ellos y por ellos es que vamos a continuar en esta tarea de seguir cambiando la patria y mejorándola todos los días un poquito más.”
(Diario Página 12, sábado 23 de marzo de 2013)