Causa alegría que un Ama de Casa, Roxana Matilde Romano, haya creado un Himno a la Provincia de Mendoza. Y aún más: que haya ganado el concurso entre otros 407 participantes, intelectuales, etc….
¿Por qué ganaría? ¿Será porque es una letra sencilla, con sentimientos y lugares sentidos por la población? ¿Será que comienza una era en la que se dejan de lado las discriminaciones de género y de clase y se valora la realidad de los mendocinos y mendocinas en general?
¿Será porque un Ama de Casa o una empleada doméstica ahora pueden jubilarse?
Hemos leído rechazos a este Himno, generalmente de personas que tienen acceso a carreras universitarias y otras posibilidades que les ha dado la pertenencia a clases sociales privilegiadas. Tal vez esas personas no pueden valorar este Himno porque surge de la “base”, de las experiencias de la vida real y del sentir popular que no conocieron.
Esa vertiente cultural se cuela en la queja aparecida en algunos medios, que lamentan que el gobierno haya convocado un concurso abierto para el Himno a Mendoza. A esa apertura la califican de “demagogia”. Parece que quieren volver al sistema del voto calificado…
Sin duda que es totalmente legítimo opinar y tomar posición respecto de la calidad de la pieza seleccionada. También habrá que ver la argumentación del Jurado seleccionador.
Pero para quienes pertenecemos a la Asociación Civil Solidarias Amas de Casa de la República Argentina (SACRA-Mendoza) representa, sin duda, un hecho trascendente que un Ama de Casa -una más entre millones- se haya creído capaz de crear un símbolo de la Provincia y que ese esfuerzo haya recibido el reconocimiento oficial.
Seguramente, este acontecimiento singular dará mucha tela que cortar y suscitará largas polémicas. Y eso está muy bien. Porque lo crucial, lo sustancial, lo que ya no tiene retorno es que en nuestra Patria ya no hay cotos reservados para nadie y que hasta un Ama de Casa -ignota y hasta ayer discriminada- ya puede aspirar a ser la voz de sus conciudadanos.
Asociación Civil SACRA – Mendoza.
Dra. Graciela E. Sosa, D.N.I.: 4.112.766, Presidenta.