Hugo Rafael Chávez Frías, el comandante, para todos los que admiramos y respetamos su vida, su obra, su lucha.
Es claro que trascendió a su país, fue un líder mundial así como es Fidel Castro, un líder mundial que luchó por los sectores más desprotegidos y denunció las injusticias.
Festeja la derecha y festeja la oligarquía venezolana y las oligarquías latinoamericanas.
Llora el pueblo, lloramos todos los que encontramos en él lo más preciado para un ser político, el alimento de nuestro espíritu, la esperanza, la utopía.
Chávez nos trasmitió la esperanza de que un mundo mejor es posible, de que el socialismo para el siglo XXI es posible, de que hay un mundo mejor y es socialista.
Chávez mejoró todos los índices sociales de su país empobrecido, incluyendo venezolanos pero además fue el presidente de Latinoamérica.
Hizo de la unidad Latinoamericana una bandera, del amor a nuestra patria grande una política, de la fe en la militancia política su vida.
San Martín y Bolívar fundaron la unidad latinoamericana y Chávez la hizo realidad en nuestro tiempo, permitiendo que Cuba se sostenga y dando salud a miles y miles de venezolanos con la ayuda de médicos cubanos.
Se paró al lado de Fidel, fue el segundo diablo para el imperio al lado de Fidel, los latinoamericanos lo queremos, lo sentimos un familiar, un compañero un amigo, como si lo hubiéramos conocido de toda la vida como si Chávez y Latinoamérica fueran indisolubles.
Nunca se avanzó tanto en la unidad Latinoamericana como en este camino recorrido por Hugo Chávez.
“Ayer estuvo el Diablo aquí en este mismo lugar huele a azufre todavía”, así se refirió a George W. Bush, luego logró parar el ALCA, con la consigna ALCA, ALCARAJO CON EL ALCA.
Luego el Rey de España, muy afecto a cazar elefantes le dijo “porque no te callas”, les molestaba que Hugo Chavez fuera digno, que denunciara a los poderosos que fuera la fuerza de Latinoamérica.
Chávez es Latinoamérica y Latinoamérica es Chávez.
Como dice calle 13 en su canción “Tú no puedes comprar al viento. Tú no puedes comprar al sol. Tú no puedes comprar la lluvia. Tú no puedes comprar el calor. Tú no puedes comprar las nubes. Tú no puedes comprar los colores. Tú no puedes comprar mi alegría. Tú no puedes comprar mis dolores.”
El capitalismo seguramente arrasó con Marte dijo Chávez, no todo se compra y se vende.
Lo odiaba el capitalismo, lo demonizaban ¿y porque?
Eduardo Galeano lo explica magistralmente “Tenían 2 millones de niños que no podían ir a las escuelas porque no tenían documentos. Ahí llegó un gobierno, ese gobierno diabólico, demoníaco, que hace cosas elementales, como decir "Los niños deben ser aceptados en las escuelas con o sin documentos". Y ahí se cayó el mundo: eso es una prueba de que Chávez es un malvado malvadísimo.”
Suena de fondo el tema de calle 13, dice con respecto a Latinoamérica: “aquí se respira lucha”.
Latinoamérica de Chávez, Latinoamérica luchando por el socialismo del siglo XXI.
Hasta la victoria siempre Comandante.
